Por:
Adele Gómez Pecina, Psychology Intern.
Karime Fajer Paniagua, Heroes CEO.
OK, para entrar en tema, mira esto:
¿Te identificas? ¿Se parece a alguien que conoces?
A lo largo de nuestro día experimentamos diversas emociones, por lo general relacionadas con situaciones cotidianas como el tráfico, el trabajo, la escuela, el novio, la familia, etc. Y entre esas emociones, a veces llega a aparecer el enojo. A todos nos ha pasado: Solo necesitas un pequeño estímulo, y ¡PUM!, nuestro Pato Donald sale a relucir. Y no siempre es bueno…
- ¿Alguna vez has sentido tanto enojo que sientes que tu cabeza va a explotar?
- ¿Sueles hacer berrinches con frecuencia?
- ¿Te la vives en pleito con las personas cercanas a ti?
Propiedad de Disney Studios
Si llegaste a contestar “sí” a alguna de estas preguntas, ¡Take it easy! Y si te pasa muy seguido, podrías estarte conviertiendo en Donald Duck, un personaje explosivo e impredecible con quien es algo difícil convivir…
Todo el mundo pasa por esos momentos, sin embargo hay que saber cómo recuperar el control. Por eso aquí te presentamos algunas infalibles técnicas del antienojo, antiberrinche y arreglapleitos para esos momentos que requieren «Anger Management 2.0»:
Necesitas: Ganas de calmarte, y ¡tu chocolate o dulce favorito!
En caso de «Donald Attack», primero que nada, NO REACCIONES ENSEGUIDA. No te muevas, no grites, ¡NO HAGAS NADA! Solo inhala profundamente y exhala lento tres veces.- Toma un pedazo de chocolate o dulce y permite que se disuelva en tu boca unos segundos. Sigue respirando y comienza a pensar una respuesta asertiva.
- Ahora sí, con un poco de dulzura y tu respiración bajo control, responde. OJO: No decimos que no reacciones, solo queremos que muestres tu enojo de una manera más controlada.
- En caso de verte en medio de una discusión toma un chocolate o los dulces que creas necesarios para evitar gritar. Mientras se van disolviendo en tu boca, ESCUCHA al otro, medita tus respuesta, y responde con calma expresando lo que te tiene alterad@. Esto te dará también tiempo para pensar en lo que dices ya que muchas veces lanzamos palabras que realmente no queríamos decir.
El enojo no es malo, pero en exceso nos puede ocasionar malos ratos. Si detectas que te mantienes en un constante estado de ira, o que no puedes controlar tu impulsividad, ¡Pide ayuda!
En Heroes te escuchamos y te queremos como un patito feliz 🙂
