El nuevo Capitán América es negro, Calvin Ellis es un Superman increíblemente parecido al presidente Barack Obama, Thor es mujer, Ms. Marvel es musulmana y el Hombre Araña es Miles Morales, parte puertorriqueño.
Los superhéroes de los cómics establecidos como la mitología moderna, que en su mayoría fueron hombres blancos de ojos azules y cabello castaño, están siendo redibujados para representar mejor la diversidad de colores, religiones y géneros de los seguidores. Y no podríamos estar más felices al respecto.
Axel Alonso, editor en jefe de Marvel Comics, ha resaltado la importancia de evolucionar el mundo de la cultura pop de acuerdo a los cambios de la sociedad:
“Los papeles en la sociedad no son lo que eran antes, son mucho más diversos”, dijo Alonso, quien también ha pastoreado una boda gay en X-Men.
Marvel Comics
Marvel no es la única compañía que se fija en la diversidad. Un Superman alternativo negro, que es presidente de Estados Unidos, es parte de un equipo en The Multiversity de DC Comics. DC también se jacta de tener más libros de historietas con protagonistas femeninas que cualquier otra compañía, incluyendo a Batichica, Gatúbela, Harley Quinn y la Mujer Maravilla.
Se vuelve de suma importancia reforzar la desaparición de tabúes y estereotipos de nuestra comunidad, pues cada vez se hace más evidente el movimiento global hacia la apertura y diversificación sobre temas como la sexualidad, diferencias raciales e inclusión de discapacidades como los temas más recurrentes.
DE LO DIVERSO
La diversidad cultural es una fuerza motriz del desarrollo, no sólo en la que respecto al crecimiento económico, sino como medio de tener una vida intelectual, afectiva, moral y espiritual más enriquecedora. Esta diversidad cultural, se manifiesta por la diversidad del lenguaje, y de las creencias religiosas presentes en todos los atributos de la sociedad humana.
La diversidad cultural no es un fenómeno reciente. Históricamente y a nivel internacional, los flujos migratorios intercontinentales son una constante, por lo que han inducido la convivencia de sociedades de distintas culturas, en donde es indispensable mantener los valores tales como la tolerancia, la equidad y el respeto. La defensa de la diversidad cultural se basa en el sano equilibrio que debe de lograrse con la ayuda de los diferentes grupos culturales que existen en el mundo, pero sin afectar a terceros o exceptuar alguna cultura.
Por otro lado, la diversidad sexual es un término que se usa para referirse a la diversidad dentro de la orientación sexual; de hecho, habitualmente se usaba una clasificación simple de tres orientaciones: heterosexual, homosexual y bisexual; sin embargo, según diversas teorías de la sexología, como la teoría de Kinsey y la queer, esta clasificación resulta insuficiente para describir la complejidad de la sexualidad en la especie humana.
DIVERSIFICANDOI LA CULTURA POP
Hace medio siglo, Marvel y DC Comics se sometieron al Comics Code Authority, una institución de censura que velaba por la decencia de todas las publicaciones superheróicas. Toda expresión de sexualidad, en texto o imagen, quedaba terminantemente prohibida. Durante décadas fue virtualmente imposible encontrar un cómic de superhéroes que transgrediese la moral puritana estadounidense. No obstante, a fines de los 80, un grupo de autores británicos desafiaron esa obsoleta tradición de represión, y crearon historias en las que la sexualidad, ese elemento indesligable de la psique humana, por fin formaba parte del mundo superheróico.
Sugerir que un héroe tenía tendencias homosexuales ya no era una meta inalcanzable; sin embargo, representar a un personaje transexual seguía siendo un tabú. Para poder explorar esta temática, los autores tuvieron que utilizar todo su ingenio. Por ejemplo, Grant Morrison unió a dos clásicos integrantes de The Doom Patrol (Negative Man y Negative Woman) en una sola entidad: Rebis, alienígena hermafrodita; poco tiempo después, Morrison y Brendan McCarthy crearon a un travesti con el poder de la teletransportación: Danny The Street (en homenaje a Danny La Rue, famoso drag queen británico).
The Doom Patrol
Dentro de la misma línea, los gigantes de los cómics han tocado la diversidad racial y religiosa de manera importante. Recientemente Marvel ha debutado a Miles Morales, la estrella de Ultimate Spider-Man, y DC Comics lanzó la serie regular Batwing, que presenta al primer personaje africano en tomar el manto del Murciélago. Sí, Batman en negro. Y también Superman. Y el Capitán América.
Primer número de la nueva Ms. Marvel
Y las mujeres no solo siguen tomando fuerza como heroínas, sino que son musulmanas, lesbianas y diosas. Kamala, cuya familia es de Pakistán, ha seguido devotamente la carrera de la rubia de ojos azules Carol Danvers, que ahora lleva el nombre de Capitana Marvel, un nombre que heredó de un héroe masculino. Cuando Kamala descubre sus poderes, incluyendo la habilidad de cambiar de forma, toma el nombre en código “Ms. Marvel” -el que Carol usó para sí misma cuando empezó su carrera como superheroína.
Por el lado de las discapacidades, Barbara Gordon es conocida por los seguidores de Batman porque, además de ser la hija del comisionado Gordon, fue la primer Batichica. Precisamente siendo Batichica, es que queda confinada a una silla de ruedas, por culpa de Joker. Lejos de pensar en dejar a un lado su carrera de heroína, Barbara se transformaría en el Oráculo, líder y mentora del equipo femenino Birds of Pray. Y cómo olvidar a Charles Xavier: ¿quién necesita caminar, cuando tienes tales poderes telekinéticos?
EL PUNTO ES:
Realmente no se trata de qué personajes marquen diferencias, sino del significado que los fanáticos le dan a esta inclusión cada vez más constante que hace que los estereotipos americanos bajo los cuales están hechos la mayoría de los comics abran un camino a otras culturas, apuntando a una cultura pop global.
Los comics surgieron en la década de los 30’s y siempre han sido influenciados por las diferentes crisis sociales de la época en que se escriben. Desde la segunda Guerra Mundial, donde surgen los primeros superhéroes y héroes patrióticos, hasta el día de hoy, donde la diversidad es el tema a tratar. No decimos que el día de hoy la diversidad humana sea un problema, sino que la atención de los jóvenes se encuentra en la defensa en relación a la igualdad de los seres humanos, sin importar color, raza, religión u orientación sexual.
La utilidad de estos cambios en los cómics y películas pop es notable. Se trata de fomentar desde lo fantástico la realidad, se trata de hacer que los más pequeños encuentren inspiración sobre lo extraordinario. Como los pequeños con espectro autista que el día de hoy pueden identificarse con Drax de Guardianes de la Galaxia, quien es incapaz de entender la metáfora, hasta los jóvenes homosexuales que encuentran cada vez más apertura en cine y televisión. Incluso la creación de los emoticones con diferentes tonos de piel representan un avance importante en la inclusión y aceptación de las diferencias que nos hacen únicos y que son una realidad innegable del mundo en el que vivimos.
Miles Morales
El multiculturalismo y la diversidad sexual siempre han estado presentes en el mundo de los comics y películas, sin embargo no habían tomado una relevancia social importante más allá de la censura. El día de hoy se tratan con un enfoque distinto que lleva a las generaciones más jóvenes a defender todos los colores y ramas de pensamiento que crean al ser humano y que le hacen especial. Daredevil recientemente cobra un significado distinto y a pesar de ser un personaje “viejo” en el universo Marvel, se retoma por los fanáticos más jóvenes que reciben las diferencias físicas de este vigilante como una invitación a la aceptación y una posibilidad para identificarse con lo que es distinto y maravilloso.
Estamos convencidos de que estos cambios son vistos con un ojo más crítico y sensible que hace algunos años, desestigmatizando la homosexualidad, los estereotipos raciales y haciendo una fuerte afirmación hacia la necesidad de nuestra sociedad de aceptar que lo diferente es también extraordinario.
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